1 - En la primera, AIR2 SAN transforma, gracias a un proceso de descarga electroestática, el oxígeno (O2), presente en el aire del habitáculo, en ozono (O3) y lo expande de forma precisa, controlada y uniforme (no mediante un simple temporizador). Esta fase se hace más efectiva y segura gracias a un filtro colocado en la aspiración impidiendo así el paso de polvo y partículas hacia el generador de ozono. Esto es para garantizar una vida útil más larga del propio generador, y aún más importante, para eliminar el riesgo de una producción accidental de peligroso ácido nítrico que podría generarse debido a la entrada de partículas en la cámara de transformación O2 -> O3.
2 - La segunda fase es propiamente la de desinfección, en la cual el microprocesador de AIR2 SAN, en base a los datos obtenidos por los sensores, mantiene la cantidad ideal de ozono y determina la permanencia necesaria en el habitáculo para proceder a la eliminación de virus, moho, hongos y bacterias según lo previsto en los estándares médico-quirúrgicos. Este proceso automatizado además evita cualquier riesgo de error humano.
